Si hay dos tipos de rumores que habitualmente van de la mano con cada nuevo lanzamiento de Apple (ya sea de hardware o de software) son, por un lado, el que habla de la posible fecha de lanzamiento y, por otro, el que anuncia un retraso en dicha fecha, sea por la razón que sea e independientemente del tiempo que falte para cumplir los plazos.
Pues bien, después de conocer cuándo se celebrará la WWDC 2013, conferencia en la que Apple presentará las principales características de iOS 7 y OS X 10.9, ya han surgido rumores en torno a un posible retraso en el lanzamiento de la próxima gran actualización de iOS. Sin embargo, no es la primera vez que lo oímos. El pasado mes de abril ya hubo comentarios en este sentido, señalando además que los profundos cambios que la compañía tenía pensados para iOS 7 habían obligado a un trasvase de ingenieros de desarrollo desde los grupos de trabajo de OS X a los de iOS.
Sin embargo, pocas horas después, aparecía en All Things Digital otro rumor, en este caso en sentido opuesto, apuntando a que Apple cumplirá las fechas que tiene marcadas internamente. La información procedía de fuentes anónimas.
En cualquier caso, si hay algo en lo que sí coinciden los analistas es en esperar un cambio importante en la interfaz de iOS 7, eliminando todo rastro (o, al menos, la mayor parte) del famoso skeumorfismo promovido por Scott Forstall, anterior máximo responsable del sistema operativo móvil.
Lo curioso del tema es que, en realidad, casi nunca se puede hablar de retrasos porque Apple no acostumbra a dar fechas de futuros lanzamientos hasta que hace la presentación definitiva del producto (con la excepción de la comercialización del iPhone 4 en color blanco y de los iMac de última generación). Cuando la compañía anuncia un nuevo dispositivo o sistema, lo habitual es que diga la fecha en el que va a llegar al mercado (que suele ser a los pocos días). En caso de que el lanzamiento vaya a ser más tarde (iOS se presenta en junio y no llega hasta septiembre u octubre), se hace referencia a periodos menos precisos como, por ejemplo, otoño.
Vía: All Things Digital
