Aunque el iPhone se empezó a comercializar 3 años antes que el iPad, lo cierto es que los primeros prototipos de la tableta son anteriores a los del móvil. Sin embargo, ni la tecnología ni el mercado estaban preparados para el iPad, así que Apple centró sus esfuerzos en el desarrollo del iPhone.
Desde la llegada del móvil en 2007, Apple fue añadiendo nuevas características al sistema. Una de las funcionalidades que pudo haber tenido pero que Steve Jobs rechazó fue iBooks, la aplicación de lectura de libros electrónicos. Y lo rechazó hasta 2009 porque pensaba que la pantalla del móvil no era lo suficientemente grande y cómoda para leer libros en este formato. También descartó su uso en el Mac, porque su aspecto (con tantas teclas) no le recordaban al de un libro tradicional.
Sin embargo, la insistencia de Eddy Cue y la llegada del iPad convencieron a Jobs del lanzamiento de este servicio. Esto sucedió, aproximadamente, en noviembre de 2009, lo que dejó a Cue con poco tiempo para negociar con las editoriales los acuerdos necesarios para el anuncio del servicio.
Vía: TUAW