A medida que aumenta la demanda del iPad (se prevé un incremento del 70% en el segundo semestre, llegando a los 8 millones de unidades vendidas), Apple está presionando a los fabricantes de componentes del dispositivo para que reduzcan sus precios hasta en un 10%. Este recorte también se aplicará a las piezas del iPhone. La justificación de Apple es que estas empresas ya están obteniendo un mayor beneficio al aumentar las ventas. Las compañías “afectadas” son las encargadas de la producción de los paneles táctiles, las baterías y determinados componentes ópticos.
Los fabricantes esperan nuevas reducciones en los próximos meses. Apple vendió casi 4,7 millones de iPad en el anterior trimestre fiscal.
Vía: Cult of Mac