Tanto LG como Samsung (las compañías encargadas de la fabricación de la pantalla Retina Display que, supuestamente, incorporará la próxima versión de iPad) están teniendo serias dificultades para la fabricación en serie de este componente. Este tipo de pantalla, con una resolución de 2048 x 1536, será una de las características estrella del nuevo modelo. Por supuesto, todavía no hay fecha de lanzamiento del dispositivo aunque, si se cumple el periodo de renovación actual que sigue Apple, se espera que esté disponible en la primavera de 2012.
El problema para ambos fabricantes es conseguir llegar a producir las pantallas en las cantidades (y, evidentemente, con las calidades) exigidas por Apple. En caso de no conseguirlo, la compañía estadounidense podría tener un “plan B”: implementar una pantalla con una resolución intermedia entre la actual y la futura, de 1600 x 1200, lo que también tendría sus implicaciones negativas ya que habría que adaptar las aplicaciones para que se visualizasen correctamente con dicha resolución.
Vía: Cult of Mac
