Volvemos con nuestra sección dedicada a Steve Jobs. En ella os traemos historias curiosas, anécdotas, éxitos, fracasos y mucho más sobre uno de los genios más grandes de la historia. Siempre cortitas y entretenidas. Todos los artículos de One More Jobs serán publicados exactamente a las 9:41am, hora de California (pulsa aquí para saber por qué).
La historia de hoy viene de la mano de Kristopher Wright y se ubica en esos años increíblemente creativos que Jobs pasó entre su despido de Apple y su posterior vuelta triunfal.
En aquella época tenía una novia llamada Rebecca, que tenía linfoma de Hodgkin. Era una época dura de su vida y ella estaba bastante deprimida por ello, incluso aunque la quimioterapia la estaba curando poco a poco.
Rebecca era una gran fan de las películas de Pixar. Y yo sabía que Steve Jobs también había estado luchando contra el cáncer y era alguien muy relevante en Pixar. (…) Le mandé una carta a Steve Jobs contándole la situación de Rebecca y pidiéndole que le enviara un autógrafo, en la esperanza de que aquello supusiera algo positivo para ella. Nunca pensé que me respondería, pero creía que merecía la pena el intento.
Una semana más tarde recibí un paquete por correo. En un sobre grueso había una carta de Steve Jobs hablando de su lucha contra el cáncer y cómo le deseaba a Rebecca una pronta recuperación. En el mismo sobre venían seis películas de Pixar firmadas por John Lasseter, Andrew Stanton, Pete Docter y Joe Ranft (otro enfermo de cáncer). Cada uno de ellos le había escrito una carta a Rebecca deseándole lo mejor.
Jobs no tenía ningún motivo para hacer todo esto pero lo hizo de todas formas. Steve Jobs nunca fue conocido por sus obras caritativas y mucha gente piensa que sólo estaba motivado por el egoísmo y la avaricia. Pero este acto contradice esa idea para mí. Esto fue un acto de bondad, positivismo y caridad.
(…) Esta historia es como siempre recordaré a Steve Jobs. No por los avances tecnológicos que promovió, ni por los límites que superó. (…) Rebecca atesoró esas cartas y los autógrafos, y le infundieron positividad en su vida. Finalmente Rebecca consiguió recuperarse con quimio y radioterapia.
Jobs murió de cáncer y durante su larga enfermedad estuvo muy concienciado con el asunto. Este gesto le ennoblece y nos hace ver un poco mejor quién era esa persona que había detrás del nombre.
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Imagen original: BI
