Dos noticias dan nuevas alas a la idea del Apple Car. Aunque noticias confirmadas, suponen un nuevo ladrillo al muro de rumores que generalmente siempre suele rodear esta compañía, pero la capacidad de los de Cupertino para jugar al despiste es monumental, como sabemos. Ahora mismo parece que todo estaría apuntando a que, en efecto, pueden estar desarrollando su propio coche.
Por un lado, parece ser que están revisando propiedades de hasta 800.000 pies cuadrados (más de 74.000 metros cuadrados) para la construcción de nuevas instalaciones, lo que sólo tiene sentido si van a construir algo realmente gordo (sus nuevas instalaciones, muy avanzadas, son de 4.15 millones de pies cuadrados, con lo que para ese trajín no va a ser…). Las nuevas instalaciones se hallarían en el área de San Francisco, y se sumarían a otros terrenos e instalaciones que han ido adquiriendo recientemente. Por otro lado, han contratado a un antiguo experto en carga de coches eléctricos de Google, llamado Kurt Adelberger, que podría formar parte de la estrategia de construcción de un vehículo de motor eléctrico (no se espera otra cosa de un hipotético coche de la manzana teniendo en cuenta el afecto que le tienen a todo lo relativo al medio ambiente). Esta contratación se suma al goteo constante de nuevos empleados relacionados con la automoción que han ido entrando en la compañía en los últimos meses.
Particularmente siempre he sido muy escéptico con esta idea del Apple Car, pero cada día surgen más dudas al respecto. Desde luego, sería una vuelta de tuerca como las que nos tienen acostumbrados, pero también supongo que, de estar desarrollando dicho proyecto, habrán tenido en cuenta el hecho de que es un mercado muy cerrado y muy saturado. A empresas como Tesla les está costando un montón posicionarse en un mercado en el que todo está saturado de coches asiáticos y europeos, más baratos, y en el que los coches americanos no tienen muy buena fama, incluso dentro de sus propias fronteras. Pero bueno, también es Apple, así que es posible que puedan superar muchos de esos problemas de forma práctica. Eso sí, lo que no se espera es que sea ni autónomo ni tenga cosas especialmente raras, aunque lo suyo sería pensar que fuera un aparato de alta electrónica en la línea del resto de productos de la empresa. Es de esperar que se presente el año que viene lo más tardar, porque la carga de los rumores se puede mantener durante un tiempo, pero no indefinidamente. Tiempo al tiempo.