¿Los ricos usan iOS y los pobres Android (II)? Ojo con las encuestas

Los clientes de iOS viajan en avión, mientras que los de Android prefieren el autobús. Curiosa diferencia, ¿no? También podemos añadir que los fans del iPhone disfrutan degustando vino y suelen tener acciones, mientras que la cerveza y el tabaco triunfan entre los de Android, que además han comido en el McDonalds en el último mes.

Estos datos que llaman tanto la atención son resultado de una encuesta realizada por Battery Ventures. Y como son llamativas, corren como la pólvora por internet. Sin embargo, es necesario entrar en más detalle antes de confirmar el tópico recurrente de que iOS es para los ricos mientras que los pobres deben conformarse con terminales Android, más baratos y peores. Porque la realidad no es tan sencilla como todo esto.

Para empezar, aunque no he encontrado el dato, algunas preguntas (como la de que si tienen armas de fuego) hacen sospechar que la encuesta está hecha en EEUU, una población con características propias que no son directamente extrapolables a Colombia, Francia o Camboya, por decir algunos ejemplos. Pero es que resulta que si eliminas el sesgo ocasionado por el poder adquisitivo del encuestado, las diferencias entre ambos sistemas operativos se desvanecen. Ello conduce a que algunas conclusiones del estudio sean sólo "parcialmente correctas", cosa que admite hasta el propio responsable del estudio.

Pongamos un ejemplo clarificador. ¿Los coches de marca Audi son para ricos? Bueno, está claro que no son baratos, luego no estarán al alcance de todos los públicos. Desde ese punto de vista es probable que sus conductores, por ejemplo, viajen más en avión, medio que tiene más uso entre clases adineradas que entre las empobrecidas. Sin embargo, esto no implica que podamos concluir que los conductores que NO tienen un Audi son pobres. Muchos tendrán Mercedes, BMW o incluso algún Ferrari. Y sería atrevido (y erróneo) resumir alegremente que son pobres. Puede que haciendo la media, sea cierto que los que no tienen Audi (básicamente, todos los demás) prefieran la cerveza y de vez en cuando estropeen sus arterias con algún que otro Big Mac. Pero estaríamos comparando peras con manzanas. ¿Puede hacerse? Sí. Los resultados sobre peras serán útiles, y también los de las manzanas. Pero no tendrá relevancia alguna compararlos.

Es decir, que los usuarios de Android con dinero (que probablemente utilizarán terminales de gama alta) tienen los mismos gustos que los de iOS. Las diferencias encontradas no son por tanto especialmente significativas. Lo único relevante de este estudio es lo que ya sabemos todos: Apple sólo vende equipos de gama alta que van orientados a un segmento poblacional con más recursos. Si hacemos esta misma encuesta sobre clientes con un Samsung Galaxy S5 y una Galaxy Tab el resultado será semejante al obtenido en clientes de iPhone y iPad. Y si lo hacemos en otros países mostrarán patrones asociados con clases altas y medias-altas, como mayor formación, más conciencia medioambiental o preocupación por las dietas sanas. Si les preguntan a clientes con equipos Android chinos de menos de 100€ los resultados serán muy distintos.

Es cierto que estos estudios son muy útiles para las empresas de marketing, aerolíneas o de cualquier tipo, ya que les permite hacer campañas orientadas a segmentos poblacionales concretos. Para Audi quizás tenga más sentido poner anuncios en iOS que en Android. Pero también será rentable hacer campañas en colaboración con la Galaxy Pro, que va orientada a clientes profesionales parecidos a los del iPad.

En resumen, todos estos datos pueden ser entretenidos, dan para muchos titulares en prensa y blogs y generan vivos comentarios. Pero para el simple público no pasan de ser lo que el genial Josu Mezo podría llamar un anecdato.

Vía: Recode | Imagen: Gizmodo