Volvemos con nuestra sección dedicada a Steve Jobs. En ella os traemos historias curiosas, anécdotas, éxitos, fracasos y mucho más sobre uno de los genios más grandes de la historia. Cortitas, entretenidas y cada dos semanas. Todos los artículos de One More Jobs serán publicados exactamente a las 9:41am, hora de California (pulsa aquí para saber por qué).
Hoy vamos a ver esa facilidad que tenía Jobs para crear productos sencillos, que cualquiera pudiera usar. La historia nos llega de la mano de Mike Evangelist, ejecutivo de una empresa alemana de software que fue comprada por Apple en 2000. Tras la adquisición, Evangelist fue asignado al equipo de desarrollo de un programa de grabado de DVD (que más adelante se convertiría en iDVD). Y esto es lo que ocurrió:
«Teníamos tres semanas para prepararnos», cuenta Evangelist. Él y otro empleado diseñaron preciosas maquetas de una interfaz perfecta para el nuevo programa. Cuando llegó el día, Evangelist y su equipo se reunieron en la sala de juntas. Habían traído página tras página de capturas de pantalla de su prototipo, mostrando las distintas ventanas del programa y las opciones del menú, todo con documentación describiendo cómo funcionaría la app.
«Entonces Steve entra», recuerda Evangelist. «No mira nada de nuestro trabajo. Agarra un rotulador y se va a la pizarra blanca. Dibuja un rectángulo. ‘Esta es la nueva aplicación’, dice, ‘Tiene una ventana. Arrastras el vídeo en la ventana y le das al botón que pone «grabar». Eso es todo. Esto es lo que vamos a hacer‘.»
«Nos quedamos estupefactos», dice Evangelist. Así no era como se tomaban las decisiones en su antigua compañía. De hecho, no es como los productos se planificaban en ningún otro lado en la industria.
Un ejemplo muy corto pero clarificador de lo muy distinta que es Apple a otras compañías. En Apple se empieza por la experiencia de usuario, por el diseño final que se encontrará el cliente en sus manos. Y después se hace todo el trabajo técnico que sea necesario para hacerlo realidad. En otras empresas se hace al revés, inventando cosas y buscando después su aplicación práctica. En Google los empleados tienen un 20% de su tiempo libre para proyectos propios. El diseño parte de muchas personas diferentes, desde dentro hacia afuera. Eso da lugar a docenas de productos cada año. Y aunque no todo funciona, lo cierto es que algunos proyectos han llegado a ser un éxito increíble (Gmail o Google News, por ejemplo).
Por contra, en Apple el diseño va desde el final al principio. Los empleados concentran el 100% de su tiempo en muy pocos productos. Evangelist cuenta que el diseño de interfaz del sistema operativo del Mac estaba a cargo de un equipo de sólo 10 personas. Con un equipo tan pequeño es normal que sólo puedan sacar dos o tres productos al año.
Este enfoque funcionaba porque Jobs y su equipo sabían exactamente lo que querían, La férrea dirección de Apple mantenía a las tropas concentrada. «Todo el mundo sabe cuál es el plan» decía un antiguo ingeniero de Apple.
Todavía conservo las diapositivas que preparé para aquella reunión. Y son ridículas por su complejidad.
Esta era sin duda una de las grandes habilidades de Jobs. Diseñar una experiencia de usuario superior. Abandonar los productos para geeks y lanzar tecnología para todos los públicos.
Ayer mismo me acordaba yo de todo esto, cuando escuchaba un programa de radio. En él criticaban que Apple Music te imponía una calidad de 256 kbps (frente a los 320 de la competencia) y no permite elegir la calidad de sonido de la música, lo cual les parecía absolutamente inaceptable y una prueba (más) de que el nuevo servicio de Apple era un desastre y a nadie le gustaba. No voy yo a coger aquí la bola de cristal y vaticinar el éxito de Music (aunque apuesto que sí que triunfará). Pero estos expertos que hablaban en la radio se olvidan de que existen miles de millones de personas que no saben lo que co%$nes es el bitrate de una canción. Gente a la que le importa poco si son 256 o lo que sea, mientras se oiga suficientemente bien. Personas, en definitiva, que no son, ni quieren ser, expertos en tecnología. Una infinidad de público que lo que valora es una buena experiencia de usuario y que le importa un pepino que su iPhone siga funcionando perfectamente a día de hoy con un sólo giga de RAM.
Y la pelea Android – iOS nunca terminará. Porque los geeks seguirán vendiendo lo mucho que se puede hacer con un equipo que uno puede configurar a su antojo. Y no se enteran de que los 1.000 millones de personas usan iOS lo que quieren, precisamente, es no tener que configurar nada.
Está claro que Jobs sabía lo que es la experiencia de usuario. Esperemos que Cook siga por el mismo camino.
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Vía: Fast Company | Imagen original: BI
El otro día me pasó lo que no esperaba. Mi pareja, reacia en principio a usar productos Apple (no por nada en particular, es sólo por tocar las narices XD), se quedó flipada con la calidad de sonido de las canciones de Apple Music (conseguí configurárselo para que lo usara después de múltiples rechazos). Me dijo, más o menos, "que se oía mejor que Google Music y Spotify", incluso con menos ratio de sonido. Y estoy de acuerdo, la música se escucha muy bien, incluso en streaming puro y duro en 3G, con un sonido cristalino. Imagino que dependerá de codecs y leches de se tipo, pero es lo cierto. De hecho, 256 kbps es, para el oído humano, una calidad de sonido muy alta. El que siempre haya sibaritas que crean que es mejor cuanto más alto, no significa que el resto de la gente sea capaz de reconocerlo. Es como cuando comparan el iPhone con la competencia petada de recursos: cuando cae en las manos de la gente flipan porque funciona mejor que su aparato que, teóricamente, tiene más RAM, procesador y demás historias. Y es porque han optimizado ese hardware y software tanto que han conseguido más con menos. Y eso es algo de lo que se pueden sentir orgullosos. Ah, y para el que vaya a salir con "menos y más caro": esas optimizaciones también cuestan dinero. Que la competencia no lo traslado al resto de productos sólo indica que están haciendo productos de peor calidad de lo que deberían. O directamente, ni hacen las optimizaciones, que es lo normal.
Independientemente de la calidad del sonido, la interfaz de Apple Music es todo menos intuitiva, la verdad no se en que estaba pensando el equipo que desarrolló la interfaz y demás partes visuales del programa, pero me queda claro que no tiene NADA que ver con la filosofía de hacer las cosas fáciles para que el usuario solo las use sin mas problema. Creo que empezaron justo como los chicos de la historia de este post. Es tan mala y poco intuitiva que varias personas han solicitado mi ayuda para hacer down grade y volver a la versión 8.3 con la amigable y familiar interfaz de música.
@Seiken. Ahí te doy la razón. La UI de Apple Music no es muy "Apple" que digamos. En mi opinión mejora un poco la de Spotify pero en cualquier caso no es nada intuitiva. Espero que eso mejore en iOS 9 (aunque no soy muy optimista). En algo se tiene que notar que Jobs ya no está por aquí…
Bueno, se os ha olvidado añadir "en mi opinión", no? Para mi es fantástica. Han orientado la interface al descubrimiento de artistas y géneros, que es la función que normalmente la gente usa, y el que quiera usar la función normal, tiene la solapa de toda la vida para ello… Yo no le veo tanta complicación, la verdad… Y sí, le da 30 patadas a la de Spotify y sus listados grises del demonio…
Alguien mas a quien se le pasó añadir "en mi opinión"…
Coincido en que solo las personas que tienen mucho tiempo para revisar y familiarizase con la app podrían sacarle provecho, el resto de usuarios común y corriente (mayoría) esto es un golpe en la entrepierna. NADA que ver con la exitosa formula de Jobs.
Según el que está "dando el ejemplo" y TAMPOCO pone "En mi opinión"…
La interfaz está hecha para gente que tiene tiempo de sobra para andar escarbando por menús y andar familiarizándose y aprendiendo los caminos, atajos y funciones, no para el usuario promedio que espera tener un software listo para usar sin complicaciónes, justo como ERA antes Apple. Hasta en estos detalles se nota la ENORME falta que les hace falta Jobs.