Microsoft ha reconocido, en palabras de su CEO Steve Ballmer, que las ventas iniciales de la tableta Surface están siendo modestas, aunque no ha dado cifras concretas. Hay que tener en cuenta que el dispositivo solo se vende, por ahora, en unos pocos mercados y que el modelo que se comercializa es el RT, basado en arquitectura ARM. Se trata de una versión menos potente que la Pro (con arquitectura Intel), de la que se espera su lanzamiento en las próximas semanas.
Hasta ahora ha habido bastantes dificultades para adquirir la tableta. En principio se pensaba que el motivo era la alta demanda existente, pero con este anuncio resulta evidente que Microsoft no está pudiendo cumplir con el (escaso) volumen de pedidos.
Las críticas recibidas por la tableta no han sido del todo buenas, al menos en lo que respecta al software, donde las pocas aplicaciones disponibles no terminan de funcionar correctamente. Seguro que la compañía intenta cambiar esta tendencia con el lanzamiento de Surface Pro.