InicioCompetenciaNo sólo Apple LI: Peras por Manzanas (X)

No sólo Apple LI: Peras por Manzanas (X)

Un Linux que parecía un Mac fue posible… Durante un tiempo al menos. Pear OS fue un experimento que desapareció del mundo hace unos años y que podía haber sido algo más. Simplemente desapareció del mapa y dejó a muchos con un sabor amargo en la boca de lo que podía haber sido tener una experiencia de usuario «parecida» a un Mac…

Publicidad

Investigando sobre versiones de Android para PC (cosas tengo…), me reencontré con esta joyita: Pear OS. Este sistema «from scratch» desarrollado por David Tavares duró un tiempo y, según la nota de prensa que dejó tras de si, fue adquirido por una empresa que prefería «quedar en el anonimato»… Obviamente, los rumores no dejaron de apuntar a Apple como posible «empresa anónima» tras la compra, aunque eso, claro está, no ha sido demostrado nunca. Sin embargo, no deja de ser curioso como este programador juntó las piezas para desarrollar un sistema visualmente muy parecido al OS X de la época (estamos hablando ya de 2014), y aunque todavía sigue siendo posible encontrar copias de la ISO por ahí, evidentemente ya no está en activo ni se actualiza.

Hasta tuvo un clon de iCloud, Pear Cloud, que tenía unas funcionalidades muy parecidas. Apple ha tenido que enfrentarse a clones diversos a lo largo de los años, especialmente entre los fabricantes de hardware, y Linux siempre a contado con «skins» o temas visuales emulando el aspecto de OS X (el famoso «Aqua«, para los que vivimos en Linux de los noventa, era un punto de referencia, especialmente en Gnome). No dejaban de ser homenajes más o menos acertados al entorno del Mac, pero Pear OS era diferente: intentaba emular cada posible elemento del sistema de Apple, tanto visualmente como internamente. Algo difícil de lograr, sin duda, pero dado que ambos sistemas son de tipo Unix (macOS es un Unix certificado y GNU/Linux, que es como se llama el sistema completo, nunca ha pretendido serlo, pero ambos están basados en los mismos estándares básicos).

¿Y eso es todo? Los usuarios de Mac no nos vemos especialmente obligados a tener la necesidad de usar Linux, pero cuando no tienes tu ordenador favorito a mano, usar un Linux normal o Windows puede ser un poco pesadilla… Los que llevamos muchos años usando ordenadores tenemos menos problemas, pero a veces cambiar tu Mac habitual por otro equipo supone a veces la impresión de que te faltan manos y piernas, te da la sensación de estar usando algo torpe y sin sentido… Bueno, Pear OS nos dejó pero quedó otro sistema que también pretendió desde el principio emular la visualización y funcionalidad de un Mac: Elementary OS. Este sistema, aún en activo, también realiza una cierta emulación del entorno de OS X, aunque para mi gusto se acercaba más Pear OS al objetivo final, que era tener una experiencia de usuario semejante al original.

De todas formas, hay que preguntarse porqué a lo largo de los años se ha perseguido de esta manera conseguir un entorno tipo OS X en otros sistemas (incluso Windows, sí, con temas tampoco demasiado resultones pero curiosos, o por ejemplo, la capacidad de Parallels Desktop y su modo de emulación visual Mac en las Windows virtualizadas). Más allá de que cuando pruebas un Mac ya te cuesta mucho volver a otros entornos, es curioso como los usuarios sobre todo de Linux siempre han mirado al sistema de Cupertino, para imitarlo o incluso masacrarlo como en los casos comentados. Cuando Miguel de Icaza, el icónico desarrollador de Gnome, Mono (el clon de .NET para Linux) y Xamarin anunció que se pasaba a Mac, siendo él como fue uno de los desarrolladores históricos de muchos componentes relevantes del sistema GNU/Linux, el revuelo que se levantó fue grande (el comentario «Das asco» de algunos titulares da idea del nivel de debate de la comunidad linuxera en general). Estaba cansado de tener que estar recompilando el núcleo, instalando extensiones constantemente y tener que dominar infinidad de herramientas para hacer casi cualquier cosa en el sistema del pingüino. Al final creo que su crítica iba por el hecho de que a pesar de los avances, Linux había evolucionado muy poco en veinte años, y que ya era hora de un cambio. Posiblemente sistemas como Elementary OS sean una posible respuesta (no lo he usado, aunque me pica la curiosidad), pero no puedo por más que darle la razón al programador mexicano.

Linux representa hoy día alrededor de un 50% en servidores y un 1% en escritorios. Esta diferencia tan brutal es debida fundamentalmente a que Linux no se creó como un proyecto de sistema operativo para usuarios. Su finalidad era la de un experimento para demostrar que era posible crear un sistema Unix desde cero a título educativo, pero se les fue de las manos, especialmente a Linus Torvalds, el creador original del sistema. Fue desarrollado por técnicos para técnicos, y nunca estuvo en su mente que esto fuera un sistema que pudiera competir con Windows o Mac a nivel de usuario. Las intentonas que se han realizado nunca han fructificado (y eso que en su momento, versiones como Mandrake Linux y otros fueron un paso adelante importante, yo aún tengo los CDs originales perdidos por casa y la verdad, reconozco que me gustó). ¿Este año será el año de Linux en el escritorio? ¿Lo será alguna vez?

Artículos relacionados

Artículos recientes