Si has llegado a esta página es que llevas horas peleando con este juego infernal y quieres buscar alguna manera de alcanzar una puntuación decente con la que puedas desengancharte del dichoso juego del leñador.
Tras el éxito arrollador de Flappy Bird muchos desarrolladores se han lanzado a publicar juegos con un aspecto tan cutre que haría sonrojar a cualquier diseñador que no viva congelado en los años 80. Las únicas condiciones son que sea muy simple, adictivo y diabólicamente difícil. Ahora el que se ha puesto de moda es Timberman. Sus gráficos pixelados y su música de máquina arcade, absolutamente viejuna, hará las delicias de los jugones más veteranos. Y pondrá de los nervios a todos aquellos que no son capaces de pasar de los 100 puntos. Así que si quieres sobresalir entre tus amigos y hacer varios cientos de puntos, en iPaderos te contamos en dos entregas los 16 trucos para conseguirlo.
1. Primero lo básico
En este juego debes esquivar las ramas de un pérfido árbol empeñado en hacerte papilla (en su defensa decir que no paramos de talarlo…). Para darle vidilla al asunto hay una barra de tiempo que se llena si vas rápido y se vacía en caso contrario. Según avanzas en el juego la barra se vacía cada vez más rápido, lo cual contribuye a que te pongas más nervioso y cometas un error. Es por tanto un juego de habilidad en el que tu único enemigo eres tú mismo.
2. Olvida la maldita barra de tiempo
Casi todos los que juegan a Timberman se ponen nerviosos por la dichosa barra de tiempo. Y lo cierto es que no hay motivos reales para hacerlo ya que el 99% de las veces que te matan no es por tiempo sino por traumatismo craneo-encefálico grave. La barra de tiempo sube y baja independientemente de que la mires o no. Desviar tus ojos y tu atención de tu foco es la receta segura del fracaso, ya que te pondrá nervioso, romperá tu ritmo y te hará cometer errores. ¿Y todo para qué? ¿Para saber que tienes que ir rápido? ¡Pero si eso ya lo sabes!
3. Establece un ritmo y mejóralo
Algunos, especialmente los novatos, intercalan momentos de velocidad frenética con pasitos de conejo asustado al llegar a zonas peligrosas. Es importante que aprendas (sobre todo al principio) a avanzar con ritmo constante, aunque sea lento. Olvida la barra de tiempo y ocúpate sólo de alcanzar una velocidad en la que estés cómodo y no te choques. Sin acelerar ni frenar. Empieza por 3 pulsaciones por segundo y coge seguridad en este ritmo. Mientras te maten por darte con las ramas esa velocidad estará bien y no te tienes que agobiar en mejorarla. Cuando veas que te matan más veces por tiempo debes apretar el acelerador para ir subiendo tu velocidad de batalla. Con 4 pulsaciones llegarás a 200 golpes como mucho. Tendrás que subir el ritmo para llegar más lejos.
4. Elige un foco fijo al que mirar
Una vez que has alcanzado un ritmo constante verás que las ramas van bajando siempre a la misma velocidad. Eso te ayudará a aprender cuándo debes pulsar para cambiar de lado. Para conseguir la precisión más alta posible es bueno que elijas una zona concreta a la que miras todo el rato, sin desviar la mirada a otra parte de la pantalla. La opción más segura es la franja central que hay por debajo de la puntuación. Mi experiencia es que mirar a la altura del leñador es perjudicial, ya que los trozos cortados que salen volando tienden a despistar. Yo de hecho pulso justo a la altura de la cabeza del leñador, con lo que tapo todo lo que hay a su altura con los dos dedos. Por su parte, mirar arriba te hace perder conciencia de cuándo debes cambiar de lado.
5. Técnica del salto I: El suelo
Para jugar a este juego bien debes abstraerte un poco y ver los obstáculos de un modo que te permita esquivarlos rápida y eficazmente. Una de las que me funcionaba es imaginar que voy en coche y las partes despejadas (sin ramas) son el circuito por el que debo circular. Sin embargo, la que mejor me ha funcionado es la técnica del salto. Consiste en elegir un lado del árbol en el que te sientes más cómodo, en mi caso el izquierdo, y que será nuestro suelo. A partir de ahí tu objetivo es avanzar siempre por ese lado (el suelo) y cambiar solo al lado derecho para saltar las ramas que te vas encontrando. Es decir, dedo izquierdo para avanzar, dedo derecho para saltar (o al revés si lo prefieres).
6. Técnica del salto II: Saltar y volar
Para aplicar la técnica del salto debes centrar tus ojos en el lado izquierdo del árbol y concentrarte únicamente en las ramas de ese lado (en serio, si lo haces bien casi podrías tapar la parte derecha de la pantalla y seguir jugando igual). Si viene una rama por el suelo la saltas con una doble pulsación en el lado derecho. Si vienen varias ramas seguidas imagina que pulsando en el lado derecho mantienes a tu leñador volando, y vuelve al lado izquierdo justo cuando se acaben los obstáculos del suelo. Si eres capaz de visualizar el juego de esta manera te sorprenderá la enorme mejora en la velocidad. Con ella reduces la dificultad del juego casi a la mitad puesto que sólo debes atender a las ramas de un lado. Una de las claves del éxito de esta técnica es conseguir y mantener siempre una velocidad constante mientras avanzas y saltas. De este modo tu trabajo consiste en pulsar todo el rato en el suelo a un ritmo constante, excepto para saltar ramas individuales (dos taps rápidos) y volar (varios taps seguidos).
7. Los frenéticos zigzag
La técnica del salto no es perfecta y hay que adaptarla a dos situaciones especiales. La primera excepción es cuando viene un zigzag largo, es decir, una secuencia de ramas que te hacen cambiar de lado cada dos pulsaciones. Es un patrón se repite bastante y te obliga a hacer varios saltos rápidos seguidos, lo cual puede ser difícil. La buena noticia es que es fácil de superar si lo identificas y modificas tu técnica sobre la marcha. Cuando te encuentres con un zigzag debes intercalar dobles pulsaciones a cada lado. No intentes visualizar lo que está pasando porque vas demasiado rápido para ver cada rama por separado. Si llega un zigzag reduce el ritmo justo antes de llegar para sincronizar perfectamente el primer salto y a partir de ahí encadena dos taps a cada lado hasta que lo superes. Una vez lo pases recupera la técnica de salto y el ritmo normal. En mi opinión, el cambio de técnica que debes hacer antes y después de un zigzag son la única excusa para ir más lento. Cualquier otra secuencia de obstáculos debería ser superada con la técnica del salto sin frenar, si de verdad quieres llegar lejos en este juego.
8. Tramos largos despejados
La otra excepción es cuando te encuentras con un tramo largo y despejado. En este caso debes romper tu ritmo normal y aprovechar para pulsar lo más rápido que puedas y rellenar la barra de tiempo. Si estás usando la técnica del salto será fácil hacerlo por el lado izquierdo (corres por el suelo) y algo perturbador por el lado derecho (visualizarás a tu leñador volando a toda pastilla). Sin embargo, aumentar el ritmo tiene un coste. No son pocas las veces que te la pegas justo después de uno de estos tramos así que ten mucho cuidado cuando los encuentres y vuelve a tu velocidad normal antes de que se acabe. De hecho, mi recomendación es no usar este truco hasta que veas que tienes un problema de velocidad (te matan por tiempo de vez en cuando).
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