Todavía es pronto para decir que su lanzamiento ha sido un fracaso, pero hay que reconocer que el programa de mandos MFi incorporado por Apple en iOS 7 no está suponiendo la revolución que todos esperábamos.
Presentada en la WWDC del pasado mes de junio como una de las novedades de iOS 7, se pensaba que, de cara a la campaña de Navidad, podría ser uno de los accesorios estrella de esta temporada. Sin embargo, los modelos que han aparecido hasta ahora son más bien pocos, caros y con un rendimiento bastante mejorable.
Los primeros en llegar fueron el Powershell de Logitech y el Ace Power de MOGA. Ambos con un formato de tipo cuna en el que colocar el iPhone. Es decir, limitando su uso a este dispositivo.
En el pasado CES’14 vimos otros dos modelos: el Stratus de SteelSeries y el RP One de Sigma. En este caso se trata de mandos universales, en el sentido de que se pueden utilizar tanto con iPad como con iPhone.
Aunque el diseño de los 4 es diferente, el precio es similar en todos: en torno a los 100 dólares. Excesivo para un accesorio que, si bien nos va a poder permitir disfrutar de nuestros juegos de forma diferente, puede ser demasiado para un sistema de entretenimiento no dedicado (no es una videoconsola). El precio puede venir determinado por el hecho de que . Apple obliga a los fabricantes de estos mandos a utilizar un único proveedor (Fujikura America) para determinados sensores que utilizan los botones y joysticks. Con un sistema más libre, probablemente los costes serían más bajos.
El control de Apple llega incluso a determinar el color, la forma y la separación de los botones.
Pero, además, hay otro factor que está influyendo decisivamente en el escaso interés de los posibles compradores por estos equipos. La experiencia de uso no es demasiado buena. Y aquí, probablemente, gran parte de la culpa haya que echársela también a Apple.
La compañía publicó las API de desarrollo con muy poco tiempo de margen para que las empresas pudiesen adaptar sus juegos a este sistema. Eso hace que todavía sea complicado encontrar juegos compatibles que aprovechen correctamente esta funcionalidad.
Finalmente, muchas empresas de desarrollo no ven mucho sentido en adaptar juegos pensados inicialmente para una plataforma con pantalla táctil a otra en la que se utilizan mandos físicos.
Es probable que, como en otros casos, este estándar definido por Apple para los mandos MFi vaya evolucionando con el tiempo, haciéndose más flexible y más atractivo para desarrolladores y fabricantes. Por ahora no parece más que un primer intento de la compañía en el que tiene, actualmente, mucho margen de mejora por delante.
Vía: 9to5Mac
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