Apple ha tenido una influencia decisiva en la industria, pero aquí recordamos a los que han colaborado de forma decisiva al mundo tecnológico en el que vivimos fuera del «jardín vallado». Esta sección aparecerá a las 9:41 am, hora del pacífico, como nuestra sección «One More Jobs» (pulsa aquí para saber por qué).
Ya tenemos un nuevo año aquí y el 2015 ya terminó, dejando tras de si una estela bastante sorprendente para los tecnófilos, al menos en lo que se refiere a los productos Apple. No tanto por la relevancia que ha ganado la empresa, que ha superado todos sus hitos anteriores, sino por como se está presentando el panorama para el resto de las compañías tecnológicas, que están pasando en muchos casos por algunas de sus crisis más importantes de las últimas décadas. Vamos a hacer un pequeño repaso general al año que terminó e intentaremos vislumbrar por donde pueden ir los tiros para este 2016 que se presenta inquietante en algunos casos y oscuro y poco previsible en otros.
El año 2015 ha sido un año realmente brillante para Apple. Dado que esta sección trata precisamente de no hablar de Apple y sus productos, no me voy a extender más en ello. Sólo hay que repasar lo que ha sido el año en este mismo blog para percatarse de ello. Naturalmente han habido problemas (iOS sigue dando fallos que hasta la versión 7 eran inexistentes, pero es de los pocos problemas realmente reseñables de la empresa, y la distribución del Apple Watch no fue lo que se dice brillante), pero los éxitos han sido evidentes: iPhone 6 y 6s (con sus correspondientes versiones Plus, que han sido un exitazo), y los nuevos productos, como el Apple Watch, el Apple TV y por supuesto el iPad Pro, que según Cook está llamado a ser el nuevo PC. Sí, posiblemente sea demasiado pronto para hacer afirmaciones de ese tipo, pero no sé, me da que tienen algún tipo de bola de cristal, lo que explicaría la trayectoria ascendente sin fin de los de Cupertino.
El año pasado también ha sido curioso y relevante en noticias en la competencia. Microsoft sacó por fin al mercado la nueva versión de su nuevo sistema, Windows 10, que hasta diciembre no ha superado la barrera del 15% de penetración del mercado de PC, del que Windows tiene la friolera de cerca del 90% del total (el resto está cubierto por el Mac y aproximadamente un 1% de Linux, en escritorio, obviamente). Estas cifras han hecho que los de Redmond hayan tenido que tomar medidas desesperadas como intentar que todos los que tienen versiones anteriores se cambien sí o sí por medio de machacones anuncios de traslado inmediato y, por supuesto, gratuito. Ese gratis aún está en el aire ya que si quieres reinstalar, allá por verano ya no se podrá hacer gratis (el límite era de un año desde julio, aunque no se sabe aún si lo ampliarán seguro). El nuevo sistema, con un novedoso Cortana como gran añadido, y un totalmente nuevo y escrito desde cero navegador Edge sustituyendo a Internet Explorer (que sin embargo sigue incluido por compatibilidad, lo que da un poco de mal rollo…) no está atrayendo al gran público, pero probablemente eso no sea culpa ni de Windows 10 ni de Microsoft (al menos no totalmente): las ventas de PC han caído en los últimos años hasta el punto de que este mismo año 2015 las ventas de dispositivos iOS superaron las ventas totales de equipos de informática personal, lo que es indicativo de que las cosas no van nada bien en el mundo del PC (las ventas son totales del mercado hogareño y del empresarial). Tampoco ha ayudado que IBM esté empeñada en que todo bicho viviente adopte Mac, pero de eso hablaremos luego. Surface tampoco está dando la batalla ni a iPad, ni a los MacBook, ni a las tabletas Android. De momento, desaparecida en combate, y dado como está el mercado actualmente, mi vaticinio es que no va a mejorar su presencia en el mercado significativamente este año. Y no, adelanto que tampoco será el año del nuevo invento que se sacaron de la manga hace un año, lo de las gafas virtuales. Como muchas cosas que presentan, puro humo. Tal vez sepamos algo de Oculus Rift, pero aún no habrá aplicaciones serias para esta tecnología hasta dentro de un par de años al menos.
En el mundo móvil la cosa tampoco ha ido boyante. 2015 se cerró con beneficios negativos para todas las empresas menos para Apple y Samsung. El resto tenían pérdidas en todos o algunos de los trimestres. En el caso de Samsung, el problema es que aunque ha obtenido un 11% de beneficios el año pasado, provenía de una cuota de mercado hasta 30 puntos superior, y con pérdidas trimestrales que se vienen arrastrando desde 2012. Los nuevos productos no están impulsando su mercado y la irrupción de los fabricantes chinos, precisamente en 2012, dio al traste con la mayor parte del mercado asiático. Los coreanos están ahora sudando la gota gorda porque también los indios están introduciendo sus propios modelos, incluso en el mercado occidental, con lo que la merma va a ser aún mayor en este año. Mucho tienen que cambiar las cosas próximamente si Samsung quiere superar estos problemas de forma evidente.
El resto de grandes fabricantes como LG, HTC o Sony están mucho peor que su homólogo coreano. Ellos ni siquiera tienen beneficios en algún punto del año. Este problema, proveniente de la saturación que Google ha propiciado con Android, va a profundizarse en breve, y se agudiza con el hecho de que Apple está consiguiendo que una cantidad creciente de nuevos usuarios provengan de la plataforma del robot. Microsoft directamente está out en la lucha por rascar un trozo de la tarta: la división de móviles está en mínimos después del anuncio de que todo se paralizaba y que que de momento, los miles de despidos (sobre 8.000) iban a ser indefinidos. Windows 10 para móviles aún está por llegar (recientemente apareció la versión para Xbox) y no hay visos de que de momento esto vaya a cambiar especialmente, aunque este año que viene puede haber noticias al respecto, no es probable que durante el año haya cambios visibles en el mercado retail de Microsoft. Los chinos están copando cada vez más cuota de mercado en base a vender masivamente teléfonos mayormente asequibles, aunque se encuentran en la misma situación que los grandes distribuidores, con pérdidas. Luego veremos que posiblemente en los próximos tiempos esto dé lugar a cambios en el mercado que atomice en mayor medida a los nuevos protagonistas del mundo Android.
¿Qué nos espera para 2016? Naturalmente, hacer predicciones es algo muy complicado, y más en época de crisis. La prospectiva es un arte difícil que requiere de tener toda la información, que sólo puedes conseguir si eres uno de esos mega-gurús de algunos medios o corporaciones como Bloomberg. Pero siempre podemos echar a volar un poco la imaginación e intentar detectar y aproximarnos a lo que puede terminar pasando en los próximos meses. Sin más dilación, vamos a ver posibles atisbos de lo que nos podemos encontrar en este siempre movido mercado tecnológico.
IBM dio un coletazo realmente peligroso al mundo del PC el año pasado al anunciar que estaba empezando a pasarse a Mac y que, de hecho, ayudaría a sus grandes clientes a pasarse al sistema de Apple al declarar que el Mac era más barato que el PC y que tiene un programa de migración que puede terminar de darle la puntilla al ordenador personal en el mundo de la gran empresa (el mayor consumidor de este producto ya que el mercado de retail, el de la calle, está prácticamente cerrado). Habiendo alcanzado las 100 apps para iOS dentro de su programa en colaboración con Apple Mobile First, la apuesta del mastodonte informático por el universo Apple es más que evidente. Esto deja a Microsoft en una situación compleja ya que los clientes de IBM son la mayoría de las empresas más importantes del planeta. IBM y Microsoft nunca han mantenido una relación fácil, sobre todo desde que Microsoft les hizo “la caidita” con OS/2 (un buen tema para tratar en esta sección), pero ahora el Gran Azul, como se le llama coloquialmente a la corporación, se desmarca totalmente de su pasado PC y están volcados en el “nuevo” mundo de la manzana. Intel tampoco lo está pasando bien con Apple: desde hace años que los de Cupertino vienen amenazando con empezar a fabricar sus propios chips (parece que las pantallas van a ser un hecho este año), pero aunque los Mac siguen portando los chips de Intel, esta situación lleva tiempo en la cuerda floja debido a los distintos rumores de que Apple podría estar desarrollando su propio procesador para Mac, lo que les daría una independencia total de arquitectura y obviamente también de costes y de proveedores).
Android va a sufrir cambios este año. Google se ha librado de una buena gracias a los fallos cometidos por Microsoft y su Windows Mobile, que si bien apuntaban maneras en 2013 y 2014, en 2015 se esfumaron completamente. Pero aunque a Google le esté yendo bien con la publicidad en móvil (no así en web, donde siguen teniendo pérdidas), la propia plataforma en si misma puede tener serios cambios en su estatus de mercado este 2016. Primero de todo, va a ser el año de los fabricantes chinos. Su expansión por el mundo va a ser total y completa, no sólo con sus marcas propias, sino por el hecho de que prácticamente todos los móviles Android son fabricados en el país oriental. Da igual que hablemos de Alcatel, BQ o cualquier otra marca europea o americana: sus aparatos son parcial o totalmente fabricados en China, así como los sistemas Android modificados que portan. Y sí, los iPhone y iPad también se fabrican en China, pero es evidente que el producto final depende de lo que se les pague… Las incompatibilidades entre ellos también se están acrecentando debido a la fragmentación brutal del mercado. Más del 80% sigue siendo versión 4 en algún de sus revisiones, con una aún lenta penetración de la versión 5 (que apareció en el mercado en septiembre-octubre de 2014), ya que muchos dispositivos, debido al coste de sus componentes, no pueden portar la nueva versión con garantías.
Mientras, algunos seguimos esperando ansiosos la aparición de ese sistema que podría hacer frente a Android en el mercado de perfil medio-bajo. Especular con que este será el año de Firefox OS es un poco baladí, ya que hace dos años se anunciaba como la gran “esperanza roja” frente a Android y aún seguimos esperando… Es cierto que aquí en España Movistar (Telefónica) ha vendido algunas unidades, y que de tapandillo están intentando metérselo a algunos clientes que lo están mirando de forma poco agradable (he tenido uno en las manos y desde luego no da la impresión de que pueda competir con Android hoy por hoy). Así que de momento no, no hay competencia para Android en la gama media-baja. De momento… El descuelgue definitivo de la versión móvil de Ubuntu dejó con muy mal sabor de boca a la mayoría de los fans del código abierto que lo esperaban como agua de mayo… Este año no es previsible que surja una iniciativa semejante a no ser que consigan relanzar de alguna forma Firefox OS.
Querría terminar con nuestro querido iPad. No habrá iPad Air con 3D Touch este año, mala suerte, veremos que puede pasar más adelante y lo más probable es que 2017 sea el año definitivo. iPad Pro ha sido acogido con cierta frialdad por la crítica, pero IBM ya ha prometido apps específicas para este modelo y eso va a llamar el interés corporativo. Surface no está presentando batalla de momento. Existe un temor importante a que se quede como la 1 y la 2, que vendieron demasiadas pocas unidades y tuvieron que ser retirados. Tal vez la estrategia de Microsoft deba pasar por el largo plazo y aguantar el tirón, aunque con las decisiones que están tomando últimamente, yo no me jugaría el cuello…
Buf, que montón de cosas para todo un año, pero con esto podemos ir abriendo boca… Continuaremos con artículos más específicos porque hay mucha tela que cortar…
Ya vengo yo a defender a Microsoft jejeje (perdonadme, pero llevo bastante en silencio). http://www.microsoftinsider.es/94132/microsoft-ya…
@Luis. La Surface no es algo en lo que Microsoft esté triunfando (al menos por ahora). Que durante un mes haya conseguido dominar el canal de venta online en EEUU es notable. Pero al final lo que importan son las ventas globales en todos los países, a través de todos los canales. Eso es lo que determina el éxito de un producto. En el último informe de IDC que se ha publicado http://www.idc.com/getdoc.jsp?containerId=prUS259… Microsoft ni siquiera sale en el top 5 mundial. No es que Microsoft lo haga todo mal, claro que no. Pero lo que atisbo es un poco falta de claridad en sus estrategias. Uno mira sus productos y no tiene claro qué so y para qué sirven. Tableta? PC? ambas cosas? Si termina de darle el empujón definitivo a Windows 10 y lo pone en todas partes (y lo hace bien) puede que tire para arriba. Lo cual nos vendría bien a todos. Cuanto mayor sea la competencia mejores tendrán que ser los productos de Apple para seguir vivos. Gracias por escribirnos. Nos gusta tener todos los puntos de vista!